
Por: Olga Daniela Ibarra Landinez
No quiero leer hace días: ¡ayuda!
Así como los escritores presentan bloqueos al sentarse a escribir, o los pintores de repente se quedan sin inspiración y ganas de pensar en una nueva obra, los lectores también podemos atravesar por etapas en las que leer se vuelve una tarea tediosa y aplazable.
El bloqueo del lector llega fácilmente y sin que te lo notes. Un día te levantas, tomas un libro y de repente te das cuenta de que llevas más de 10 minutos leyendo, pero con la mente en otro lugar, te obligas a releer una y otra vez la misma página. Poco a poco vas acumulando libros y con el tiempo descubres que han pasado meses y aún no logras leer más de dos páginas.
Es muy común que luego de un tiempo de lectura constante y sin descanso, la mente genere una especie de bloqueo ¡Sí! Nuestro cerebro se cansa de leer. Las causas de esta situación son diversas; algunos simplemente leemos tanto que nuestra mente se abruma de recibir tanta información. Otros aseguran que luego de leer una historia que los marca no pueden iniciar un nuevo libro, ya que no logran enfocarse, algo así como un duelo.
Para los que somos lectores consagrados este bloqueo puede resultar frustrante, sin embargo, en estos casos por más de que nos parezca inconcebible, lo más recomendable es dejar de leer por un tiempo. Retoma la serie que tienes abandonada o desempolva ese rompecabezas de 1000 piezas que guardas en el armario hace meses. Lo más importante es que no te preocupes, así como llegó el bloqueo con el tiempo se irá. Forzarte a leer es tedioso, no es posible que disfrutes la historia e inconscientemente, la mente va creando un rechazo aun mayor hacia los libros en general.
5 consejos para salir del bloqueo lector
- Comienza por lo fácil
Si tus habilidades de lectura están un poco oxidadas, probablemente sea mejor no empezar con “El arco iris de la gravedad”de Thomas Pynchon o con “La Divina Comedia” de Dante. A veces el problema de los lectores es que apuntamos demasiado alto. En muchos casos, el bloqueo del lector está causado por el gran dilema de esos libros “que debes leer”. En lugar de guiarte por exigencias sociales absurdas, empieza con algo corto y fácil de digerir. Una vez que recuperes el ritmo, puedes realizar lecturas más desafiantes.
- Considera los cuentos y novelas cortas
En comparación con una novela de 350 páginas, los relatos cortos no parecerán una tarea tan insuperable. Los más recomendable es apuntar a micro relatos, cuentos o novelas cortas. Así tendrás la oportunidad de descubrir qué nuevos estilos y temas te gustan sin tener un compromiso demasiado grande. En ITA Editorial tenemos una amplia selección de obras antológicas de diversos temas, que son el resultado de los relatos ganadores de nuestras convocatorias mensuales. Puedes consultarlos en nuestra página www.itabooks.com.
- Si no te está gustando, déjalo
La lectura debe ser una actividad placentera, si te aterra pensar en retomar ese libro que tienes en la mesita de noche, quizá debas replantear tu elección y buscar una nueva historia. Partamos del hecho que, si vives un promedio de 85 años, la cantidad de libros que alcanzaras a leer será un aproximado de 1215, suponiendo que ya estes alrededor de los 30 años… ¿vale la pena perder el tiempo con lecturas que no disfrutas? Creo que conoces la respuesta.
- Escucha un audiolibro
Muchos tradicionalistas te dirán que los audiolibros no cuentan realmente como “lectura”, sin embargo, algunas investigaciones revelan lo contrario. Un estudio realizado en 2019 por La Casa Cultural del Libro en Chile no encontró ninguna diferencia en la comprensión de la lectura entre los que habían escuchado un audiolibro y los que habían utilizado un lector electrónico o un libro físico.
Puede parecer contradictorio, pero los audiolibros también pueden ayudar a vencer el bloqueo del lector, esto se debe a que pueden ayudar a reavivar tu pasión por el aprendizaje y el consumo de historias en un momento en el que tienes dificultades para leer. Prueba escuchar el audiolibro mientras vas camino al trabajo, limpias la casa o haces ejercicio. Te sentirás extra realizado por haber hecho dos cosas productivas a la vez, y puede proporcionarte el impulso que necesitas para volver a leer.
- Relee tu libro favorito
Cuando todo lo demás falla, vuelve a tu lugar seguro, visita a un viejo amigo. Tus libros favoritos son memorables por una razón, y a veces releer un libro querido por tercera vez es todo lo que se necesita para superar el bloqueo. También puedes buscar opciones similares a tus autores y libros favoritos.
Existen sitios como Book Browse que te permiten encontrar lecturas similares que se ajusten a tus gustos, o consultar tus booktubers favoritos, que quizás hayan reseñado algún libro interesante que se acerquen a tus lecturas frecuentes.