Como ese entramado tejido del chifón

La historia gira entorno a Oriana Machado Garcés, una mujer que nace con un don especial para la costura y el diseño de vestidos, quien deja ver su talento a muy temprana edad y sueña con tener un taller grande donde atender a la fila de clientas que llegarán. Su vida es una continua lucha llena de maltratos, engaños y humillaciones por parte de Alfonso, su marido.

Con el pasar de los años, por distintas circunstancias, sus hermanos y sus hijas terminan involucrados de una u otra forma en labores de costura, o asociadas a esta. ¿Qué están repitiendo?, ¿qué está cosiendo cada uno?, ¿por qué terminaron todos vinculados a la misma labor?

La novela viaja entre el presente y el pasado para ir encontrando las claves, si las hay, del destino que llevan a cuestas y el origen mismo de los olvidos que comienzan a tener sus hermanas y ella, cuando en la soledad de la habitación de un hospital, nota que de un tiempo hacia acá se le están olvidando cosas tan simples como que puso en el fogón el arroz de la comida.

Con muchos momentos de encuentro con ella misma, sobre todo el que le da su taza de café negro, caliente, sin azúcar, como lo aprendió de su padre, o en la mesa de corte al tanto que extiende las telas, Oriana reflexiona sobre lo que ha sido su vida, la culpabilidad que siente en el destino de sus hijos, la realización de sus sueños y también sobre el mal de la memoria que va surgiendo en ella y sus hermanas. Al final, la muerte de alguien es el detonante que hará que Oriana y, por qué no, toda la familia, renazca de nuevo, y para ello es necesario un viaje a donde todo comenzó y que marcó sus vidas para siempre.